domingo, 13 de noviembre de 2011

Refranero, refranero...

Mi pequeño homenaje a este maravilloso hallazgo, una vez en una tienda de libros viejos. Y es un Sopena, como los que llevábamos al colegio cuando éramos niños, los niños de los 80. Aquellos diccionarios, con las láminas en color intercaladas que tenían las banderas del mundo, y el ciclo vital de las plantas, y cosas que ya no recuerdo. Ya tengo tarea para los próximos 4.000 días de mi vida...