See, the sea wants to take me,
The knife wants to cut me,
Do you think you can help me?
The knife wants to cut me,
Do you think you can help me?
I Know It's Over, The Smiths
[Ves, el mar quiere llevarme,
el cuchillo quiere cortarme,
¿crees que puedes ayudarme?]
el cuchillo quiere cortarme,
¿crees que puedes ayudarme?]
Los piececillos de Ana en el agua, el domingo
9 comentarios:
El poeta M. Pacheco nació con seis dedos en cada mano. El sexto se lo cortaron atando un hilo de seda al dedo. Lentamente se fueron secando. Como las algas.
.-Con lo buen poeta que hubiera sido escribiendo a máquina con un dedo más...., comentaba él.
He contado los dedos. Te faltan dos. Uno en cada pie. Con lo buena nadadora que hubieras sido, medalla de oro en todos los campeonatos de natación.
El poeta espanta los cuchillos. No dejes que te corten los dedos. Las alas. A pesar de que todos los versos (letrilla) terminan en “arme”.
Yo pensaba que el poeta atraía los cuchillos, Tomás.
Espero valerme igual con mis cinco y cinco dedos, después de todo no quiero ser campeona en nada. Basta con nadar un poquito silenciosamente, entre las algas.
Vale. Pacheco no fue un gran poeta. Tú y yo no seremos buenos nadadores.
Los cuchillos me dan dentera. Prefiero un balazo. Claro que hay versos como cuchillos y también como balas. A mí, si se trata de versos buenos, me gustan todos. Pero prefiero para nadar el agua de "revólveres mojados" de Vallejo.
Pensaré en eso de que lo poetas atraemos los cuchillos. Tal vez sea verdad, al menos los navajazos traperos que se dan entre ellos.
Tiene gracia. Hay alguna otra posibilidad: "Hola, cuchillo", recuerdas? Jajajá...
Pues a parte de empatizar con "Intenciones" no caigo. Me caí hace tiempo y algo de espontaneísmo me rodea desde entonces.
Creo que Esteban quiere decir que podemos ser los propios cuchillos, los poetas y los escribientes.
La palabra "cuchillo" es genial, por cierto, porque acaba en "illo" y tiene "ch", rima con otras palabras simpáticas como "bichillo".
Precisely... :)
La foto es preciosa, Ana.
Gracias, Rafael. Tu comentario me anima a continuar en la vía del exhibicionismo fotográfico...
:-)
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